12 de octubre de 2012

Lo bueno, está por llegar.

Yo creía que conseguiría todo aquello que quería pero ahora me doy cuenta que las esperanzas no son buenas, y tampoco lo es pensar en futuros felices. Cada esperanza, a la larga es una décima de lagrimas mas, que nos hacen tener un remordimiento que no sabemos expresar mas que con nuestras lagrimas. Para los que viven fuera del el sentimiento de no tener a quien quieres es demasiado fácil decir "no llores, no merece la pena" o "pasa, ya se dará cuenta". Ellos no entienden el sentimiento que tienes por dentro en todo momento y hasta que no vivan lo que has vivido tu, nunca lo sabrán.
Parece difícil conseguir no tener ese sentimiento de agonía, pero con un poco de tiempo, se consigue lo que se quiere. Eso si, nunca pienses en que eres la culpable, o la tonta que quiere demasiado. Eres tu, tu misma, y eso no tiene que cambiar. ¿Que mas dan las lagrimas? ¿Y las rayadas? Tienes que ser fuerte, y afrontar todo aquello que te hace mal día a día. Tienes que confiar en ti, porque sino no confiarán en ti nunca.
Hacerte a la idea de que has perdido algo que deseabas con todo tu ser, te hará darte cuenta de cosas que antes pensabas que no eran necesarias. Siempre pensamos que sin ese alguien a quien queremos a nuestro lado no está, no podremos llegar a lo que queremos o lo suficientemente fuerte para afrontar los baches del camino. Para nada, únicamente te necesitas a ti mismo para poder conseguir tus metas, poner un poquito de confianza en lo que quieres. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario